¡COLOMBIA VA EN BUSCA DE LA PAZ! ” PERO NO A CUALQUIER PRECIO’’.
La paz!, la que propone un buen gobierno, tiene un costo
infame como en todo proceso qué va en busca la convivencia pacífica, aun cuando la
arrogancia sea pretenciosa por los
bandidos de las FARC , que durante un periodo largo han teñido con sangre el
suelo de la patria, es el tiempo en la cual buen gobierno, ofrece un alto a la
barbarie, pues esta guerra inicua si se pude ganar y es hoy cuando el estado, propone
condiciones políticas económicas y
sociales, para el restablecimiento duradero de la convivencia pacífica entre
los colombianos y con un objetivo primordial; la reincorporación a la plenitud
de la normalidad ciudadana , de
quienes han escogido el camino de la subversión armada, para no convivir con la violencia disimulada o abiertamente, pues este no es un camino para la conquista de la paz y la reconciliación. La paz plena será posible, cuando se logre la disolución de los grupos
armados, pues su desarme y
reincorporación a la sociedad debe estar dentro de un contexto de garantías especiales, la paz reside en compromisos precisos y en plazos definidos con los bandidos de las FARC, porque creer; que se pueda continuar la lucha con
ideologías obsoletas y cantos de sirena otra tantos años, es un pensamiento
prepotente e indigno , aun cuando se
vislumbra lo más ridículo, la enorme
preponderancia de la forma casi monárquica de las FARC, como medida de su
probabilidad futura de mantenerse en el poder,
en el presente; Tal vez los narcoterroristas no comprenden, que en este siglo,
los pueblos evolucionaron mas y no serán lo mismo, ya que el tiempo no se
detiene y los mecanismos de la legítima defensa varían de acuerdo a la circunstancias,
una sociedad en peligro permanente tiene el derecho de reformar la constitución
con un referendo que se mantenga dentro de los principios y parámetros democráticos para imponer la pena capital al
máximo generador de la violencia o al incitador de la misma . Y será imperativo.
Porque mientras los gobiernos conceden indultos por crímenes atroces fuera del
combate, a la nación solo le queda el perdón y el olvido, al cual no es fácil,
por las heridas abiertas y los recuerdos que no mueren, cuándo son alimentados
con actos de barbarie, en los tiempos
que se está en busca de la paz. Y son nuestros legítimos gobernantes los que
propongan el cese al fuego y a la crueldad y deben ser ellos lo que se someten
a la balanza de la justicia que le concede el derecho a la defensa como un país
democrático por excelencia, la defensa que ellos no prodigaron a las víctimas.
y es un buen gobierno el que da las inmensas garantías para el
desarme, aun a costa de los despropósitos
comentarios sectarios y espionajes al proceso, de un insignificante grupo de militares traidores a la patria y de
una parte de la sociedad narcotizada con promesas llenas de corrupción, por los
pescadores en rio revueltos que manipulan la verdad, esos políticos rancios, politiqueros mafiosos clientelistas apóstatas mentirosos y desleales del centro democrático , alimentan
la prepotencia de los bandidos narco terroristas de las FARC que se vanaglorian e infunde el terror de la superioridad armada con actos demenciales . tienen la
oportunidad de dejar las armas en donde
el magnánimo mandatario extiende
la mano de la paz, para que cesen los
genocidios, puesto que un buen gobernante se verá obligado a endurecer las penas con un
referendo que será bien vista por la
sociedad de bien la cual seria la pena capital..... Bernapuerta
